Si ya has dado el paso de instalar un equipo de ósmosis inversa porque le das importancia a tu salud y eres consciente de los beneficios que aporta beber agua purificada, puede que te encuentres en el punto de no saber muy bien cómo realizar el mantenimiento de este tipo de máquinas.
Y es que, a pesar de que los equipos de ósmosis cuentan con una alta tecnología, no debemos olvidar que de vez en cuando también requieren de algún cuidado que otro. Por ejemplo, cambiar los filtros, para que la máquina funcione adecuadamente y para que el agua que dé sea óptima y no tenga mal sabor.
Cuándo cambiar la membrana
Un buen equipo de ósmosis inversa cuenta con membranas de calidad. Partiendo de esta base podemos determinar que los filtros deben cambiarse cada tres años, dependiendo de distintos factores que analizamos a continuación:
- La zona geográfica donde está instalada: resulta evidente pensar que una membrana durará más tiempo en lugares donde el agua es de mayor calidad. Es decir, en lugares donde el agua tiene una dureza moderada o pocos sedimentos, las membranas pueden durar hasta tres años. Sin embargo, en aquellas zonas en las que el agua contenga más sedimentos, las membranas tendrán que trabajar más y, por consiguiente, se desgastarán antes, por lo que quizá deberemos cambiarlas antes de los tres años.
- La alteración en la calidad del agua: el hecho de que el agua que sale de la máquina tenga una conductividad (TDS) mayor al 10-15% con respecto al agua que entra en la misma es un indicador de que ha llegado el momento de cambiar la membrana.
- Poca producción: para saber si la máquina está realizando una producción baja deberás desconectar el desagüe y medir cuánta agua se rechaza y compararla con la que se produce. Si la producción es baja, también deberás cambiar la membrana. Puede que si no utilizas mucho tu equipo no sepas apreciar este aviso, como tampoco lo apreciarás si normalmente demandas una cantidad baja de agua a tu máquina. Sin embargo, puede que sí lo notes en la factura del agua, puesto que el equipo rechaza muchísimo líquido. Por lo tanto, si notas un aumento en la cuantía de la factura, revisa la membrana.
¿Cómo cambiar la membrana?
Lo más recomendable es que sea un especialista el que se encargue de esta tarea. Al fin y al cabo, los equipos de ósmosis inversa son aparatos de alta tecnología y su manipulación por alguien que no conoce su funcionamiento puede resultar peligrosa, ya que puede producirse una contaminación. Además, manipular la máquina sin tener conocimientos puede suponer su deterioro del equipo o incluso que este se estropee definitivamente.
Además, en el caso concreto del cambio de membrana son necesarias herramientas específicas a las que no todo el mundo tiene acceso.
En resumen, lo mejor es solicitar la ayuda de un especialista para realizar el cambio de membrana. De esta forma evitarás tanto dañar como estropear la máquina, algo que podría incidir directamente en la salubridad del agua que se consume en el hogar.