Seguro que más de una vez has escuchado hablar del pH del agua, pero quizá no tengas muy claro qué es. La respuesta es que el pH es una medida de la concentración de iones hidrógeno (H+) en el agua. Se trata de un término que viene el latín, ya que ‘pondus hydrogenii’ significa cantidad de hidrógeno.
En este post hablaremos de qué es el pH del agua y cuál es su importancia.
¿Qué es el pH en el agua?
El pH del agua es un indicador de su nivel de acidez o alcalinidad, por lo que nos indica si es un agua saludable o no. Para medirlo se utiliza una escala del 0 al 14, en la que 7.0 es la medida neutra. Una medida superior serían alcalinos, mientras que una medida inferior al 7 indicaría que nos encontramos ante ácidos. En este punto hay que tener en cuenta que cada punto supone un cambio de diez veces en cuanto a acidez se refiere. Por lo tanto, una medida de 6.0 sería diez veces más ácida que en el caso de 7.0.
Por poner algún ejemplo, un zumo de limón tiene un pH de 2,5, mientras que en el café la medida es de 5.0. En el lado contrario podemos encontrar el agua caliza, con un pH de 12.0.
¿Qué pH debe tener el agua?
Seguro que mientras leías las líneas anteriores te has preguntado cuál debe ser el pH del agua. La Unión Europea establece que para que el agua sea potable la medida del pH debe ser de entre 6,5 y 9,5.
¿Cómo podemos medir el pH?
Existen distintas herramientas para medir el pH del agua, como tiras reactivas, aparatos electrónicos de bolsillo e instrumentos más profesionales que se utilizan principalmente en laboratorios. No obstante, si quieres medir el pH del agua de casa, por ejemplo, lo mejor es contactar con un experto que realice el test.
¿Cómo mejorar el pH del agua?
Si el agua de tu casa es demasiado ácida puede llegar a representar un problema para tu salud. Para mejorar el pH del agua el mejor remedio es instalar un equipo de tratamiento de agua que lleve incorporado un sistema que regula el pH, pudiendo obtener así un agua más alcalina, que siempre será más saludable que la ácida. Y es que un agua menos ácida te ayudará a regenerar las células, a luchar contra la retención de líquidos o a evitar problemas como la osteoporosis.
Respecto a los mejores equipos de tratamiento de agua encontramos los de ósmosis inversa, como SmartWater, que incorpora post-filtros que aportan minerales y pH idóneos para el consumo humano, proporcionando un agua con una mineralización débil y un pH idóneo.
Además, este tipo de equipos mantienen el 30% de los minerales naturales del agua de nuestros acuíferos y elimina el resto de los contaminantes, además del cloro, los metales pesados, las bacterias y los virus. Además, no tiene depósito, por lo que ocupa menos espacio, ni agua parada en su interior y, lo más importante, rechaza mucho menos agua que una ósmosis inversa tradicional de 5 etapas (con postfiltro remineralizador). También tiene funciones de autolavado, por lo que siempre está en perfecto estado de uso.